Vistas de página en total

jueves, 12 de septiembre de 2013

El Dia refiere que una jueza se desvaneció, uno de los inculpados, médico de profesión la atendió de urgencia de un cólico biliar. notable caso en Santa Cruz

Las enfermedades parecen seguir a los protagonistas del Caso Rózsa, como su sombra. La juez ciudadana Anastasia Calizaya, de 47 años, sufrió un cólico biliar que obligó a paralizar la audiencia del juicio oral que sigue el Gobierno contra 38 imputados por los presuntos delitos de terrorismo y separatismo, en el Palacio de Justicia de Santa Cruz.
de 4 jueces sólo dos en la mesa. los otros 2 con parte médica. también fiscales no asisten

El incidente ocurrió cerca de las 17:00 del martes cuando el húngaro Elöd Tóásó, el segundo de los 21 procesados que han comparecido, era interrogado por los fiscales sobre su participación en una presunta red subversiva liderada por Eduardo Rózsa, quien muriera en circunstancias extrañas en el hotel Las Américas, junto a dos de sus acompañantes.
De pronto, la juez Calizaya empezó a sudar frío y se desvaneció, siendo atendida por uno de los imputados, el médico y dirigente de FSB, Juan Carlos Santistevan.
Ella compartía la testera con la también juez ciudadana Sonia Mamani, ambas elegidas del padrón electoral paceño, y la juez técnica Elena Julio Gemio, quien se recupera  de una parálisis facial, y el presidente del tribunal, Sixto Fernández.
Problemas gástricos. Santistevan informó que Calizaya tiene complicaciones en las vías biliares y por eso le aconsejó realizarse una endoscopía para ver si tiene cálculos, comúnmente llamadas piedras que obstruyen el normal flujo digestivo.
Por esa razón, la juez estuvo ayer en la mañana en la clínica Nuclear realizándose los estudios. El abogado defensor, Gary Prado, indicó que exigirán que un médico del Instituto de Medicina Forense certifique sobre su dolencia.
Fiscal Céspedes no asiste. Durante la audiencia de ayer en la que Ignacio Villa Vargas pedía la cesación a la detención, no estuvieron presentes las dos juezas ciudadanas y tampoco el fiscal Sergio Céspedes. Eso provocó que el abogado defensor, Otto Ritter, pidiera "su separación inmediata del caso", por incumplimiento de deberes. Mientras tanto, Villa Vargas se quejó que en dos oportunidades le han privado la oportunidad de reclamar que ya lleva más de 3 años detenido.