el relato. la historia oficial ha llegado a "resultado cero" según lo ve Carlos Valverde hoy en El Deber de SC

Sobreabundaron con la ‘información’, intentaron convencer al país de que son enemigos de la corrupción, se ofrecieron como esclarecedores declarantes contra los corruptos que armaron una red propia de corrupción y, claro, cuando lo consideraron conveniente decidieron que el caso ya estaba esclarecido y terminado, por lo menos en lo que se refería a los ministros que con sus declaraciones habían probado su ‘no responsabilidad’ en el asunto.

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 Así lo dio a conocer la ministra de Comunicación cuando aseguró que ahí terminaba todo lo referido al Poder Ejecutivo: en una red de mandos intermedios. Juan Ramón Quintana fue mucho más allá, aseguró que la ‘red’ se mantuvo en un tercer o cuarto nivel, casi… una cosa menor.
Los que imaginaron el relato excluyendo a los ‘altos niveles’ no tomaron en cuenta algunos hechos que resultan lapidarios para la parafernalia declarativa montada desde el Ejecutivo. Veamos lo que se ‘pasó por alto’:
- Ostreicher denunció que el fiscal Uribe conocía el caso desde 2011 y descalificó a Llorenti por haber considerado a Villegas y a Rivera como gente honorable, después de haberse conocido que los ahora imputados presionaron a jueces y a fiscales (o acordaron las cosas con ellos) y que las denuncias se acumulan por montones. Uribe y Suxo se reunían periódicamente, reconoció Suxo.
- El exministro Wilfredo Chávez aseguró que Suxo le sugirió que no despidiera a algunos de los involucrados. “Si lo echas, lo contrato yo”, habría dicho la ministra, y Villegas terminó trabajando un mes en el ministerio anticorrupción, Suxo aseguró que solo 16 días, constatación de que cumplió su propósito (probablemente la red necesitaba ‘estar’ en algunos puestos importantes para funcionar; mejor si entraba a Transparencia, por supuesto. ¿Suxo sabía? Difícil creerle a la ministra).
- La comisión de fiscales halla contradicciones entre exministros y ministros y probablemente convoque otra vez a todos; esa es mala noticia para el ‘relato’.
- Ariel Rocha, presidente de la Corte cruceña, está prófugo y es imputado por el mismo caso (falta aclarar la relación de este con funcionarios ediles y otras personalidades en el ámbito judicial; esto es imprescindible).
- Romero demostró incompetencia en el manejo de su ministerio, demoró 11 meses en enterarse de la red de corrupción en su ministerio, la destapó Sean Penn por encargo de Ostreicher.
Esto no termina aún. Está claro que hasta ahora el relato tiene ‘resultado cero’.